domingo, 30 de septiembre de 2007

Ich gebe zu, ich will mein Leben zurück

¡Feliz domingo a todos! Estoy contenta de estar un día en casa, jajaja, aunque tenga que estar haciendo proyectos. La verdad es que se está bien en mi cuarto remodelado, ¡¡me encanta!! Cuando acabe y esté puesto hasta el último detalle, prometo colgar alguna foto. Oh retuétanos, hay una avispa del demonio en mi cuarto dándose cabezazos con la ventana. Arrrg, qué asquitoooo. La muy.... aaaagh. Ya está, ya la he echado. Aaay, qué asquito. Brrrr. Vale, ya paro y me tranquilizo. Aaagh. Ya.

Pues eso, que besitos a todos y disfrutad de vuestro tiempo libre mientras lo tengáis. Muaaaaa


jueves, 27 de septiembre de 2007

No se me ocurre un título


Pues en fin, me parece que se ha acabado de momento lo de postear a saludables horas diurnas, como en vacaciones. O no, pero seguramente el porcentaje de posts a horas intempestivas aumente. O no. Porque igual estoy cansada y lo escribo en otro momento. Bueno, no sé, da igual.

Desde el 6 de septiembre que empezamos hemos tenido unas cuantas entreguillas, por qué no. Pero esta semana está siendo bastante... curiosa. Mañana proyecto de Instalaciones y Cimentaciones. Bien. Acabo de terminar de pasar la planta de mi edificio para Instalaciones a Autocad, estoy orgullosa. Mañana calculo el Agua Fría. No problem, da tiempo a todo (espero, o intento convencerme, porque desde luego ahora me pienso ir a dormir, que me lo merezco, jajaja).
Pues eso, no quería decir nada, sólo dejar constancia de... no sé. Jajaja. No importa. Que os quiero mucho y no han proyectado nuestra entrega de proyectos, pero era bonita y eso está bien. Muaaaaaaaaaaaa. Y tengo edificio para la práctica, bieeeen.


lunes, 24 de septiembre de 2007

Buen finde contado sin gracia

Este finde, mientras algunos han estado bebiendo cerveza en Munich, otros nos hemos quedado aquí tranquilamente haciendo proyectos y jugando a la DS. ¡¡Pero también nos lo hemos pasado bien!! (me acabo de dar cuenta releyendo de que he puesto "aquí" muy contenta... ¿dónde va a ser? "Aquí, en Madríz". El año pasado lo exportamos en versión bávara... "aquí, en Munich", aunque estuviéramos en Dubrovnik... creo que va con el carácter).

Volvamos al tema, porque he vuelto a poner un paréntesis demasiado largo, como en aquellos mis queridos mails al club de fans, si es que al final todo se repite, la vida es cíclica. Yo estaba hablando del finde, ¿verdad?.

Primero el cumple de mi pequeño koala... ¡¡fue genial solete!! Y mira que es difícil reunir a tanta gente conocida y que además todo el mundo se lo pase genial. Sumando el hecho de estar rodeados por playmobiles, cleopatras, mosqueteros, romanos, monjes, mariquitas ¡y hasta un condón! No tengo fotos, si alguien tiene alguna que me la mande. Me hizo mucha ilusión ver a tanta gente que no veía desde hace un año.

Y el sábado concierto con hormiguitas. Astrud. Simplemente genial. Nos metimos en la sala Sol con todo el moderneo madrileño, y nos empezamos a sentir casi modernas, jajaja. Sólo nos faltaban las gafas de pasta, pero eso nos haría parecer incluso arquitectas... y no es el objetivo. Tenemos toda la vida para eso. Pues en resumen que nos lo pasamos pipa, mucho moderno, muy buenas canciones, muy buen sonido y segunda fila. Vaya personajes. Y la noche en blanco quedará para otra edición, porque no apetecía demasiado. Si para ir al museo ya tenemos todo el año, y sin colas de tres horas.


viernes, 21 de septiembre de 2007

Vicio


¡¡Qué alguien me quite este trasto de las manos!! Qué vicio, qué vicio. Le he comprado a la DS de mi madre (sí, reíros, de mi madre), un cartucho para piratearla, y me he bajado como quinientosmil juegos. Pero no puedo dejar de jugar al supermario. ¡¡Es tan monooo!! Lo conocéis todos, así que para qué decir nada. Sólo que se me va el tiempo de las manos, y que esta mañana tendría que haber tenido ya un proyecto un poco definido... pero da igual, ¡¡a jugar!!

(igual me compro una DS propia, para dejar de usurpar la de mi pobre madre...)

sábado, 15 de septiembre de 2007

Cambios de temperatura

Hace una semanita estaba en una boda. La boda de Mariana e Iker, ¡¡es la primera vez que se me casan unos amigos!! Me consuelo pensando que son mayores que yo, así que no tengo por qué preocuparme. Creo que tampoco me preocuparía si no lo fueran. De todas formas fue un fin de semana genial, nos lo pasamos todos en grande, ¡¡muchas gracias a los dos, y enhorabuena!! Ha sido una buena forma de empezar el curso, que se presenta... cómo decirlo... interesante.

Luego llegué el lunes a clase, nos asustaron mucho en proyectos, nos mandaron un trabajo para este lunes, y cuando volví a casa no podía hablar y tenía fiebre, situación que se prolongó hasta el jueves... si que me asusté sí. Yo me inclino a pensar que ha sido una reacción alérgica a la Escuela. Es como cuando te resfrías por pasar de temperaturas muy altas a temperaturas muy bajas, o a la inversa. No puede ser sano estar el domingo de pueblo en pueblo por la costa de Vizcaya, tomando el sol, chipirones y chacolí, y de repente estar el lunes en clase oyendo cómo los profesores te dicen: "ya que en la vida profesional sufrimos mucho, hemos pensado que vosotros también tenéis que... esforzaros..." (sonrisa malvada). Así que me agarré una amigdalitis del copón. Normal.


lunes, 3 de septiembre de 2007

Grandes estupideces #1

Entre los grandes momentos de estupidez de la especie humana (y hay muchos), está ése en el que piensas: "si sigo haciendo esto me voy a... [y aquí viene la variante adecuada: cortar, caer, o lo que se tercie]". Como cuando se te rompe un vaso, y decides recoger lo que puedas antes de ir a buscar la escoba. Si hay alguien a tu lado te observa mientras recoges los pedacitos, e invariablemente te dice: "No los cojas con la mano, que te vas a cortar". Pero no, tú respondes que no pasa nada, que son grandes, y sigues orgulloso a lo tuyo, hasta que te cortas. Ambos sabíais lo que iba a pasar, pero no se puede evitar, es como las mareas. Cuando tú eres el observador, sabes que la otra persona no va a hacer caso a tus advertencias, pero necesitas reafirmarte en tu puesto de sabiduría, que luego no se diga. Y sabes que tú harías lo mismo. Y cuando efectivamente, llega el otro alelao y se corta, pues en el fondo no puedes evitar sentir que tenías razón, mientras buscas una tirita y le recuerdas: "te lo había dicho".

Otro momento estelar es ése en el que te encuentras haciendo equilibrios en el borde de una escalera de mano, todo por no bajar, moverla veinte centímetros a la izquierda y volver a subir. Entonces piensas "si sigo así me la pego". Ése es el preciso instante en el que todos deberíamos parar inmediatamente. Pero siempre tendemos a comprobar el límite hasta el que podemos llevar nuestro centro de gravedad sin que haya consecuencias irremediables. A veces hay suerte. Pocas claro, pero las hay. Las mejores son cuando consigues recuperar el equilibrio con un susto del copón, pensando: "¡¡Rayos y centellas!! ¡Pa'berme matao!(he empezado con mi política de capitán Haddock... pero de momento la ñ minúscula tendrá que esperar...).

A lo que iba yo con todo esto es a que hoy he estado a punto de pegármela un par de veces. Pero me he salvado por los pelos, como siempre. Eso sí, ayer me corté con un espejo...

domingo, 2 de septiembre de 2007

ñ minúscula

Una cosa que no me gusta de mis queridos mails al club de fans (uno de los escasísimos fallos, porque jamás reconoceré no ser completamente genial :P) es la cantidad de palabras malsonantes. Así que en esta nueva encarnación nueva y mejorada voy a intentar suprimir ese error. ¿Y cómo lo voy a hacer? Cada vez que tenga la intención de escribir algo no apto para horario infantil, lo cambiaré por una palabra correcta y aceptable. En su defecto por algo que podría haber dicho el capitán Haddock, o el capitán Trueno. Como molan los capitanes. Y si es inevitable, pues pondre un bonito "piiiiiiiiiiiiii". Y así me iré ganando poco a poco mi sillón ñ minúscula para limpiar, fijar y dar esplendor a la lengua castellana. Y podré ser todo lo pedante que quiera (efecto sonoro = carcajada maligna). Y si no lo consigo, siempre podré recurrir al efecto Cela. Si en el fondo algún taco que otro no es tan grave. ¿No?